Bugatti llegó al CES de Las Vegas con el objetivo de presentar su primer vehículo 100% eléctrico, pero nos quedamos con las ganas de ver algo en serio. Y es que la marca hoy propiedad de Rimac efectivamente estrenó un vehículo eléctrico, pero se trata de una monopatín.
Este monopatin eléctrico fue desarrollado en conjunto con la empresa Bytech International y se enmarca en la política de la marca de ofrecer accesorios alternativos y de calidad a quienes valoran el nombre Bugatti, pero que difícilmente podrán comprarse uno de sus deportivos alguna vez.
El monopatín está construido con una aleación de magnesio que la compañía describe como "aerodinámica y funcional al mismo tiempo", y monta un pequeño motor de 700W de potencia, el equivalente a casi 1 CV, es decir, mil veces menos de lo que tiene un Veyron.
Con este motor puede acelerar hasta los 30 km/h de velocidad máxima y el mismo se alimenta de una batería de 10 Ah y 360 Wh, que según la marca es capaz de recorrer hasta 35 km con una sola carga. Y para recargar la batería, basta enchufarlo en una toma domiciliaria y en cuatro horas se tiene una carga completa.
Más allá de la retórica de la marca, el diseño del scooter es bastante convencional. Lo que sí llama la atención es su luz trasera LED que proyecta el logo de la marca hacia el suelo, un detalle de calidad, sin duda. También incluye luces de giro y un panel de instrumentos digital.
Por ahora se desconoce el nombre y el precio del modelo, y cuando llegará al mercado. Seguramente sea un monopatín caro, pero el Bugatti más barato.