El mundo ya está transitando hacia una movilidad eléctrica, pero no lo hace de forma ordenada, equitativa y pareja, sino que cada región tiene distintas posibilidades y recursos para adaptar su infraestructura y adoptar esta tecnología.
Dentro d elos distintos enfoques, muchos países ven con buenos ojos a los biocombustibles como una alternativa viable para reemplazar de a poco el uso de combustibles fósiles y transitar de forma un poco más ecológica el camino a una movilidad sin emisiones.
Brasil tiene ya una larga tradición en el uso del etanol, y ahora se suma el hecho que Volkswagen anunció la creación de un centro de investigación y desarrollo de tecnología en ese país que utilizará etanol y otros biocombustibles como complemento de la electrificación. El objetivo es buscar soluciones más eficientes enfocadas a mercados emergentes.
¿Por qué el etanol?
El combustible derivado de la caña de azúcar tiene sus ventajas con respecto al combustible derivado del petróleo.
- Contamina menos al ser quemado
- Las plantas que lo producen absorben parte de las emisiones que genera
- Es un combustible renovable.
Para darte un ejemplo, hay una medición de contaminación que se llama “del pozo al escape”, es decir, cuánto contamina un combustible desde que se produce hasta que se termina de quemar. 2 - Bajo esta mirada, el etanol contamina menos que la nafta, no solo por las emisiones puras que genera al ser quemado,, también porque se produce con plantas (la caña de azúcar) cuya plantación absorbe parte del CO2 que emiten los austos que usan ese alcohol.
Finalmente, a diferencia del petróleo, el etanol es una fuente es renovable, las cuentas cierran.
Lo que se debería tener en cuenta son las medidas gubernamentales para evitar los monocultivos, deforestación y uso de agrotóxicos para que no suceda lo mismo que pasa en nuestro país con el “boom de la soja”.
¿Y si vamos directo a lo eléctrico?
En regiones como Europa, el plan es que para 2035 se prohíba por completo la venta de automóviles con motor de combustión. Pero en el caso de los mercados emergentes como los que hay en Asia y Mercosur, la falta de una infraestructura de carga, producción de energías renovables e ingresos de la población en general hace que la electrificación masiva en el corto plazo sea imposible. Por eso los biocombustibles pueden ser una buena alternativa.
Quizás el futuro nos encuentre con:
- Motores Flex (que pueden usar de nafta a eltanol al 85%)
- Híbridos que combinenimpulsores eléctrciso con térmicos alimentados por biocombustible
Quizás mientras en Europa los coches zumban, por acá los motores seguirán rugiendo.
¿Preferís un auto 100% eléctrico o uno que funcione con biocombustibles?
El estimado Ingeniero Garibaldi nos explica cómo funcionan los motores Flex más modernos