En 2019, Volvo Cars creó junto a Veoneer (empresa especializada en equipamiento de seguridad automotriz) la compañía Zenuity, con la idea de desarrollar sistemas de asistencias a la conducción y manejo autónomo. Si bien su trabajo avanza al ritmo esperado, lo cierto es que Volvo quiere acelerar los tiempos, por lo que no dudó en anunciar la división en dos de la joven empresa.
La parte que se independizará será propiedad exclusiva de Volvo y se centrará en la agilización del desarrollo del software de gestión para la conducción autómoma, que se espera equipe a los Volvo del futuro cercano. Esta nueva estructura se enfocará no sólo en el desarrollo tecnológico, sino también en la comercialización dentro de la propia red del grupo Geely (Volvo, Lynk&Co, Polestar y Lotus, por ejemplo) y a terceros.
La otra parte estará conformada por el trabajo que Zenuity viene realizando en sistemas de asistencia a la conducción avanzados, y será manejada por Veoneer.
"La nueva compañía desarrollará un software de accionamiento para la conducción autónoma avanzada y segura", dijo Dennis Nobelius, director ejecutivo de Zenuity, antes de agregar que "creemos que en el futuro solo habrá un número limitado de plataformas de software globales para la conducción autónoma, y tenemos la firme intención de desarrollar una de ellas".
Zenuity está distribuida entre ambas marcas en partes iguales. Según el nuevo acuerdo, las operaciones radicadas en Suecia y China seguirán bajo el mando de Volvo, mientras que las sedes de Alemania y Estados Unidos se unirán a Veoneer.
La nueva empresa de la marca sueca iniciará sus operaciones en el tercer trimestre de 2020. Por otro lado, el flamante software de conducción autónoma debutará en la plataforma modular SPA2, que se lanzará en 2022 con la nueva generación del XC90 y que dará vida a la gama media/alta del fabricante.