Las equipos de la Fórmula 1 discutieron este fin de semana, coincidiendo con la disputa del Gran Premio de Bahrein, la necesidad de aumentar la potencia de los actuales motores para ganar en espectáculo, a partir de 2017.
En la última reunión, el viernes por la noche en el circuito de Sakhir, todas las partes llegaron a un principio de acuerdo: conservar los actuales motores V6 turbohíbridos (en funcionamiento desde 2014), pero aumentar la potencia de los actuales 850 CV a los 1.000 CV, aunque controlando los costos.
Toto Wolff, el Team Princial de Mercedes-AMG, la escudería que domina absolutamente la Fórmula 1 desde la entrada en funcionamiento de lo motores V6, consiguió que a partir de 2017 se mantengan estos propulsores, en contra de la idea del gran patrón Bernie Ecclestone, que deseaba regresar a los V8 atmosféricos. "Yo no tengo problemas con los motores V6. Hace falta que los F1 sean más difíciles de pilotar", explicó Ecclestone.
Al igual que Wolff y el presidente de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), el francés Jean Todt, Ecclestone desea reducir los costos de los futuros motores a partir de 2017 para que las pequeñas escuderías, que atraviesan por graves problemas económicos, sean más competitivas.
"Hay varios grupos que están trabajando en un acuerdo para el reglamento de 2017, a nivel de motores y chasis", declaró Wolff, subrayando que la reunión del viernes por la noche, en la que participaron Ecclestone y el director técnico de la Fórmula 1, Charlie Whiting, había sido "muy interesante".
"Se están ultimando medidas para que la F1 sea más espectacular en 2017", señaló Wolff, que precisó que "todos los constructores desean que continuemos con los motores híbridos, es decir, Ferrari, Renault, Honda y Mercedes".
Wolff aseguro que para aumentar la potencia de los actuales motores, "existen medidas bastante sencillas" como aumentar el flujo de combustible, "aunque después hay que rediseñar componentes cruciales del motor, hacerlos más fiables y eso supone importantes costes de desarrollo", advirtió.
"Todos queremos una F1 más espectacular, no solamente en término de chasis, sino también de motores. Lo que estamos debatiendo actualmente es cómo llegar a eso", concluyó el máximo responsable de la escudería campeona del mundo.