Para muchos amantes de los fierros, los concepts son el equivalente a una supermodelo de revista que jamás podrán besar. Un ejemplar único, distante, que capta toda la atención mundial y enamora sin siquiera atisbar la mínima posibilidad de tacto. Siguiendo con la analogía, muchas de estas bellezas pasan del amor platónico al olvido en cuestión de semanas; por eso, es grato descubrir que un vehículo de producción mantiene las características que en su momento soñaron sus diseñadores.
Allá por el año 2009, Chevrolet festejaba los 50 años del Corvette presentando en el Salón de Chicago un vehículo conceptual basado en la en varios aspectos del modelo a lo largo de su historia y más que nada en el Sting Ray del 59. Además de deslumbrar al público con sus alas de gaviota y mecánica híbrida, este modelo participó en la tercera entrega de la saga Transformers, como la versión camuflada de “Sideswipe”.
En su momento corrió el rumor que ese experimento de diseño iba a servir de base para la próxima generación del Corvette; pero como es de costumbre, el concept cayó en el olvido.
La reciente presentación del Chevrolet Corvette Stingray C7 en el Salón de Detroit (Ver Noticia Relacionada) despertó las emociones de los que esperaban un digno sucesor del mítico nombre. Como ningún modelo nace por arte de magia, en Autocosmos te mostramos los elementos que el flamante niño mimado de GM tomó de su exótico concept.