Test drive

Jaguar XK-R a prueba

No sólo un deportivo emblemático, sino uno de los autos más bellos que actualmente encontramos en el mercado.

Jaguar XK-R a prueba

El Jaguar XK es un auto deportivo que nació en 1996 retomando las letras del famoso y muy codiciado XK120 que se fabricó entre 1948 y 1954. Éste último portaba la cifra 120 no por su caballaje ni por su cilindrada sino por la velocidad máxima que alcanzaba, 120 mph (193 Km/h). Gracias a esto, el XK 120 era el auto más rápido del mundo.

Hablando de la versión moderna, ésta es la segunda generación, estrenada en 2006 que solo recibió una pequeña actualización en 2012. Esta versión tiene V8 de 5.0L sobrealimentado, de origen Ford (utilizado hasta hace un par de años por el Shelby GT500). Éste eroga la impresionante cifra de 510 CV y 846 Nm de torque y está acoplado a una transmisión automática convencional de seis velocidades.

Como buen coupé deportivo tradicional, el motor delantero-central manda su potencia al eje posterior. Gracias al bajo peso y al poderoso motor, logra un tiempo de aceleración de 0 a 100 Km/h de 4.8seg y una velocidad máxima limitada electrónicamente a 250 Km/h.

A pesar de los excelentes materiales interiores del Jaguar XK-R, aquí es donde se nota más el paso del tiempo y también el hecho de que éste auto fue desarrollado aún en la etapa en la que la compañía formaba parte del conglomerado de Ford Motor Co. El llamado “facelift” del 2012 se renovaron algunas cosas como el selector de la caja automática que se eleva al encender el vehículo.

Por otro lado, existen muchas cosas que nos agradaron y que demuestran la experiencia de la marca fabricando autos de lujo deportivos. Una de ellas es el asiento y la posición de manejo que resulta sumamente cómodo para viajes largos (como en un gran turismo) y permite observar claramente hacia el exterior en una ciudad.

Como comentábamos en la parte del interior, el Jaguar XK-R es un auto deportivo, pero que también podría llegar a ser práctico y confortable; la suspensión absorbe las imperfecciones del camino, aislando a sus ocupantes.

Es en la ruta donde el XK-R brilla, aquí la puesta a punto de la dirección, la suspensión, frenos y la entrega de potencia juegan un papel muy importante, mientras que el motor se encarga de acelerar al salir de una curva.

Otro gran extra es el impresionante sonido del motor. Éste no es ensordecedor, sino un sutil pero potente rugido muy al estilo de los V8 norteamericanos pero refinado para no desentonar con la sofisticación inglesa y el lujo de la marca.

 

Gracias a esta súper producción propia que reunimos en el Especial de lo Mejor de 2012, podemos asumir el Compromiso Autocosmos: te vamos a entregar la prueba en pista de un deportivo excepcional por día hasta fin de año.

Aquí llegamos al final del recorrido, pero todavía nos quedan algunas sorpresas para comenzar el 2013 con todo, estáte atento, no te las pierdas.