El tuner italiano, Romeo Ferraris, nos entrega esta versión extravagante del pequeño FIAT 500 Abarth, pero que además de montar un impresionante kit exterior con guardabarros ensanchados además paragolpes más grandes y bajos, han logrado extraer más de 300 caballos del pequeño motor de cuatro cilindros y 1.4L turbo.
Este aumento de potencia es más del doble del que produce la versión preparada por Abarth que tiene que conformarse con "sólo" 150 CV, así que Romeo Ferraris lo considera como un auto de carrera para la calle.
Esto último se ve enfatizado aún más gracias a la pérdida de los asientos traseros, al uso de una jaula de protección y los asientos de competición en la parte delantera.
Aunque no se han liberado las cifras oficiales de aceleración ni velocidad máxima, estamos seguros que con ese diseño exterior –sobre todo en color negro-, el 500 Abarth Stradale será el 500 más extremo hasta ahora.
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